Beneficios de la musicoterapia en el tratamiento de niños con autismo
¿Conoces los importantes beneficios de la musicoterapia en el tratamiento de niños con autismo? Los niños con autismo mantienen intacta su sensibilidad musical. En el año 1987 se publicó un estudio en la Journal of Autism and Developmental Disorders en el que se demostraba que los niños con autismo conservan su sensibilidad por la música e incluso pueden sentirse aún más atraídos por estímulos musicales que los otros niños. Esto explica por qué la musicoterapia es tan eficaz en el tratamiento del autismo sobre todo cuando fallan las terapias convencionales.
De hecho, la musicoterapia no solo reduce los síntomas conductuales sino que también disminuye los movimientos estereotipados y repetitivos, a la vez que favorece la comunicación y las relaciones sociales. Estos beneficios se logran a través de diferentes técnicas, dirigidas a entrenar la respuesta física y emocional de los niños, como por ejemplo:
- Los ejercicios de vocalización
- Los movimientos para seguir el ritmo musical
- La audición musical
- Los juegos creativos musicales
- El canto solo o con acompañamiento
- Tocar instrumentos musicales
- La reproducción espontánea de ritmos
- Tararear las canciones
¿Cómo puede ayudar la Musicoterapia a los niños con autismo?
La Musicoterapia se define como el uso de la música y los elementos musicales en un proceso que busca facilitar y promover la comunicación. Permite fortalecer relaciones e intervenir en aspectos de aprendizaje, movimiento, creatividad y expresión. De igual forma contribuye a satisfacer necesidades físicas, emocionales, mentales, sociales y cognitivas. Por lo tanto, sus beneficios están dados por una búsqueda de potenciales que tratan de restaurar las funciones del individuo, de manera tal que este pueda lograr una mejor integración y en consecuencia una mejor calidad de vida.
Por ello, cuando un niño es diagnosticado con Autismo, la Musicoterapia es un tratamiento factible para promover efectos significativos a nivel físico, conductual y emocional.
Es importante remarcar que cada sesión de Musicoterapia es cuidadosamente planificada, realizada y evaluada para cubrir las necesidades propias y específicas de cada niño con Autismo, ya que lo que resulta útil y beneficioso para un paciente puede no serlo para otro.
Un proceso de Musicoterapia sistemático puede tener los siguientes efectos:
- Incentiva el desarrollo socioemocional: En los primeros pasos de una relación, los niños con TEA tienden a ignorar o rechazar físicamente los intentos de contacto social ofrecidos por aquellas personas del entorno inmediato. La musicoterapia ayuda a abordar esta conducta ofreciendo una primera relación objetal con un instrumento musical. Lejos de percibir el instrumento musical como “amenazador”, se sienten usualmente atraídos por la forma, sonido y percepción del mismo, permitiendo que la vivencia amenazante que percibe el niño de un adulto desconocido (el terapeuta), pueda ser “canalizada o mediatizada” a través de los sonidos e instrumentos.
- Promueve aspectos verbales y no verbales de la comunicación: tiende a incrementar la vocalización y el lenguaje, y a estimular procesos mentales como la comprensión, la conceptualización y las capacidades simbólicas. Mediante la musicoterapia se intentará establecer una relación comunicativa por medio de la música y experiencias sonoras.
- Toma de conciencia sobre el esquema corporal: El uso de instrumentos musicales y el trabajo con canciones logra incrementar la autopercepción y conocimiento de su propio cuerpo. Otro recurso que la musicoterapia ofrece en aspectos de comunicación consiste en incluir instrumentos de viento en el tratamiento. En muchos casos, el uso de la flauta puede incrementar la autopercepción sobre zonas como la boca, los labios, los dientes y la lengua, permitiendo una gradual toma de conciencia sobre los mecanismos que producen el habla y los órganos implicados en los mismos.
¿Qué otros aspectos puede ayudar a mejorar la musicoterapia en niños con autismo?
- Reduce la ansiedad y comportamientos repetitivos
- Disminuye la agresividad y las rabietas
- Coordinación motriz gruesa y fina
- Aprendizaje de conceptos académicos básicos
- Mejora la atención
- Aprendizaje de pautas y destrezas a nivel social
- Estimula la comprensión de diversos aspectos del lenguaje
- Incentiva el deseo de comunicación
- Ofrece un espacio para la autoexpresión y desarrollo de la creatividad
Como conclusión, una sesión de Musicoterapia en el trabajo con niños con TEA, promueve la libertad del niño a moverse y actuar de maneras específicas que facilitan el autodescubrimiento y la autoexpresión. El hecho de hacer ruido, golpear y sacudir instrumentos, gritar y explorar, generan ese plus de placer indispensable para la satisfacción emocional.